52 cartas
Las 52 cartas del tarot son una herramienta de adivinación que nos ayuda a conocer el futuro. Cada carta tiene un significado específico y nos permite interpretar el presente y el futuro.
Aunque el tarot tiene una larga historia, su uso se ha extendido especialmente en la última década. Hoy en día, es cada vez más común acudir a un tarotista para que nos adivine el futuro. Sin embargo, el tarot también se puede utilizar de forma autodidacta.
Para aprender a interpretar las cartas, es importante conocer el significado de cada una de ellas. El tarot está dividido en dos grandes bloques: las cartas de la baraja francesa y las cartas de la baraja española.
Las cartas de la baraja francesa están divididas en cuatro suits: bastos, espadas, oros y copas. Cada suit tiene 14 cartas, de las cuales 10 son numerales (del 1 al 10) y 4 son figuras (el rey, la reina, el caballero y el as).
Las cartas de la baraja española están divididas en dos suits: copas y espadas. Cada suit tiene 10 cartas, de las cuales 6 son numerales (del 1 al 6) y 4 son figuras (el rey, la reina, el caballero y el as).
Además de estas dos divisiones, existen otras dos cartas que no pertenecen a ninguna de las dos barajas: el loco y la templanza.
El loco es una carta que representa el caos y la destrucción. La templanza, por su parte, representa la moderación y la armonía.
Una vez que conocemos el significado de cada carta, podemos empezar a interpretar el tarot. Para ello, podemos utilizar un método sencillo que se llama el círculo mágico.
El círculo mágico es un diagrama en el que se representan las cuatro suits de las cartas de la baraja francesa. Cada suit está representada por un color: bastos (rojo), espadas (azul), oros (amarillo) y copas (verde).
En el círculo mágico, el primer cuadrante representa el pasado, el segundo cuadrante representa el presente, el tercer cuadrante representa el futuro inmediato y el cuarto cuadrante representa el futuro lejano.
Para interpretar el tarot, primero debemos situar la carta que queremos interpretar en el círculo mágico. Luego, debemos buscar el significado de la carta en el cuadrante correspondiente.
Por ejemplo, si queremos interpretar la carta del diablo, situaremos la carta en el cuarto cuadrante, el futuro lejano. El diablo representa la tentación y el mal.
Si queremos interpretar la carta de la fortuna, situaremos la carta en el primer cuadrante, el pasado. La fortuna representa la suerte y el éxito.
El tarot nos permite conocer nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro. Con el tarot, podemos ver el camino que nos espera y tomar las decisiones adecuadas para alcanzar nuestros objetivos.
|